Este sorprendente y maravilloso cuento africano, ‘El rey que quiso eliminar a los ancianos’, nos hace pensar acerca de la necesidad de rodearnos de ancianos y personas mayores con la suficiente experiencia como para dar buenos consejos y guiar a los jóvenes inexpertos. Un cuento popular que ha llegado hasta nosotros gracias a la tradición oral y que recogió en su día Amadou Hampate Ba.
TIEMPO DE LECTURA: 7 MINUTOS
El cuento africano El rey que quiso eliminar a los ancianos
Cuentan que hace mucho tiempo, en un pequeño poblado de la alta Sabana, un rey muy anciano murió, dejando el trono a su único hijo heredero, un joven inexperto y caprichoso.
El joven quiso hacer realidad todos sus sueños y colmar sus ansias de poder y riquezas. Y ante el temor de que los más ancianos le reprocharan sus actos, tomó una dura decisión: eliminarlos. Así que un día reunió a todos los jóvenes y ordenó que mataran a los más mayores del poblado. De no cumplir la orden, todos serían ejecutados. Así que los jóvenes no tuvieron más remedio que cumplir el mandato del sanguinario rey. Todos, menos uno, Taasi, que fue incapaz de matar a su padre, y decidió esconderlo en una cueva.
– Tranquilo, papá, nadie sabrá que estás aquí. Vendré todas las noches a traerte agua y comida.
El joven rey, por su parte, seguro de que ya nadie podría rebatir sus deseos, comenzó a pedir extraños deseos a los jóvenes, con la intención de poder ejecutar a alguno.
– Antes de que salga el sol debéis confeccionar para mi caballo una cuerda hecha con arena.
Los jóvenes se miraron absortos. ¿Cómo iban a elaborar algo así? ¡Era imposible! Cabizbajos, se fueron a sus casas, convencidos de que morirían al día siguiente.
El rey que quiso eliminar a los ancianos: el consejo del padre de Taasi
Tassi por su parte acudió esa noche a ver a su padre, tal y como le había prometido.
– Hijo, ¿qué te pasa? ¿Por qué estás tan triste?
Y Tassi le contó la exigencia del rey y la inminente ejecución de todos.
– No, no lo hará. Sé lo que debéis responder- dijo el anciano.
Y acercándose al oído de su hijo, le explicó algo… Al día siguiente, todos los jóvenes acudieron al palacio del rey.
– Bien- dijo este- ¿Tenéis ya la cuerda de arena que os pedí?
Entonces, Tassi se adelantó y dijo:
– Su excelencia, deseamos hacer una cuerda de arena tan espléndida, que necesitamos ver la que tiene para superarla…
El rey entonces frunció el ceño y dijo:
– Está bien, ya no deseo la cuerda de arena, pero debéis construir un palacio flotante entre el cielo y la tierra. Os doy tres días.
De nuevo los jóvenes se alejaron muy tristes, pensando que aquello era imposible. Pero una vez más, el padre de Tassi tenía la solución, y el joven le dijo a uno de los compañeros lo que debía decir al rey, para no ser siempre él quien diera la respuesta.
Respuestas ingeniosas a peticiones imposibles en ‘El rey que quiso eliminar a los ancianos’
Al tercer día, acudieron al palacio:
– ¿Dónde está mi palacio flotante?- dijo enfadado el joven rey.
Entonces, uno de los presentes se adelantó y dijo:
– Lo tenemos todo listo, majestad, pero necesitamos los planos que usted tendrá de los pilares que hay entre el cielo y la tierra.
El rey, lleno de furia, dijo:
– Muy bien, no habrá palacio, pero mañana debéis presentaron aquí a las 12 del mediodía. El verdugo ejecutará a quienes estén al sol y a quienes estén a la sombra.
Todos se fueron de allí con la cabeza gacha. ¿Cómo iban a poder eludir el sol o la sombra? Pero el anciano padre de Tassi también le dio una gran idea: al día siguiente, todos acudieron puntuales al palacio, pero se agruparon bajo una sombrilla que hicieron con una tela de poro grande, cuyos agujeros dejaba pasar el sol y también hacía sombra.
-Venga, empezaremos con estos jóvenes a los que les da el sol- dijo el rey al verdugo, señalando a unos cuantos.
– No señor- respondieron estos- Nos da el sol, pero también nos da la sombra… – y le indicaron la parte en la que recibían sol y aquella en la que les daba la sombra.
Y así pasó con todos ellos. Desesperado, el rey dijo entonces:
– Habéis ganado una vez más, pero mañana quiero que vengáis al palacio. Serán ejecutados los que vengan andando y aquellos que vengan cabalgando.
El rey que quiso eliminar a los ancianos: la gran lección
¿Cómo pensaban eludir aquella prueba? ¡No podían volar! Pero el padre de Tassi les dio la solución. Y al día siguiente, los jóvenes acudieron al palacio en mulas tan bajitas, que sus pies rozaban el suelo.
– A ver- dijo el rey- ¿Quiénes han venido andando?
– Yo no, seño- dijo uno de los jóvenes.
– Entonces has venido en montura.
– Tampoco, señor… Ando con los pies pero vengo en montura. Así que ni uno ni otro.
El rey entonces arrancó en una sonora carcajada. La situación le pareció de lo más cómica, porque el ingenio una vez más le había superado.
– Solo un anciano sería capaz de daros tantas buenas ideas- dijo entonces- Ruego a aquel que salvó a uno de ellos que me lo diga. Será desde hoy mi consejero, porque gracias a esta lección me he dado cuenta de que solo los ancianos son capaces de encontrar respuestas a las situaciones imposibles.
Desde ese día, el padre de Taasi consiguió el mejor puesto en palacio, y a partir de ese día todos los reyes africanos decidieron rodearse de un consejo de ancianos que les ayudarían a tomar las más difíciles decisiones.
Qué temas puedes trabajar con el cuento El rey que quiso eliminar a los ancianos
Utiliza este cuento de ‘El rey que quiso eliminar a los ancianos’ para reflexionar sobre:
- La importancia de los ancianos en la sociedad.
- El ingenio para la resolución de problemas.
- El despotismo y el abuso de poder.
Reflexiones sobre el cuento El rey que quiso eliminar a los ancianos
Una sociedad sin ancianos estaría totalmente perdida. Y es algo que las culturas más antiguas aprendieron pronto. No lo olvidemos nosotros:
- Escuchemos a la voz de la experiencia: Una sociedad que vuelve la espalda a los más sabios, está condenada al fracaso. La juventud tiene muchas virtudes, pero también tiene el defecto de la impulsividad y por supuesto, de la falta de experiencia, que es justo aquello que poseen los más mayores.
Las culturas más antiguas se dieron cuenta de la necesidad de contar con la opinión de los ancianos porque son ellos los que tienen más recursos para encontrar respuesta a las situaciones más complicadas. Es algo que nos recuerda este cuento de El rey que quiso eliminar a los ancianos.
Más reflexiones sobre ‘El rey que quiso eliminar a los ancianos’
- Para resolver un problema, usa el ingenio: En este cuento, ‘El rey que quiso eliminar a los ancianos’, las imposiciones y pruebas del rey parecían imposibles de solucionar. Sin embargo, prácticamente todos los problemas pueden tener una posible solución. Para encontrarla, eso sí, hay que usar el ingenio y tirar de inteligencia. En todos los casos, las opciones del padre de Taasi consiguieron dejar sin habla al rey.
«Una sociedad que vuelve la espalda a los más sabios, está condenada al fracaso»
— (Reflexiones sobre ‘El rey que quiso eliminar a los ancianos’)
- La respuesta al abuso de poder: El joven rey que heredó el trono comenzó a hacer uso del poder a su antojo, y quiso excederse, pero sus súbditos supieron responder gracias a los consejos del anciano y ‘derrocar’ esa tiranía. Hasta el rey entendió el mensaje del anciano y supo sentar la cabeza.
Otros fantásticos cuentos africanos
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Y te ofrecemos estos ejemplos concretos:
- El cangrejo y su hijo: No pidas a los demás aquello que no puedes hacer tú. Este cuento es fantástico para reflexionar acerca de la educación que damos a los hijos y también sobre la necesidad de asumir ciertas limitaciones impuestas por nuestra propia naturaleza.
- Por qué los perros viven con las personas: Una preciosa leyenda que explica no solo por qué estos fieles animales viven con el hombre. También reflexiona acerca de la responsabilidad y el daño que nuestras acciones (o nuestra pereza) puede ocasionar en los demás.
- El mono y el pez: En esta ocasión este cuento bien podría ser una fábula corta sobre la empatía y su verdadero significado. Tendemos a intentar ayudar a los demás pensando en qué nos hace falta a nosotros, sin darnos cuenta de que a veces con esta ayuda podemos perjudicarles.
Por supuesto, también encontrarás maravillosos cuentos narrados en nuestro canal de podcast:
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