La observación minuciosa es una virtud de los más inteligentes. Y si no, ya verás: lee este cuento, ‘El chico inteligente’, un relato popular (y anónimo) de Irán. El protagonista es un jovencito muy listo, que basa su inteligencia en la observación.
TIEMPO DE LECTURA: 3 MINUTOS Y MEDIO
El cuento del chico inteligente
Cuentan en Irán que hace mucho tiempo, un campesino se dirigía al pueblo con su burro, cargado con dos alforjas de trigo. El animal ya era viejo, y se cansaba pronto. El hombre decidió parar a descansar a la entrada del pueblo. Justo había una posada y entró a comer y beber algo. Antes, dejó bien atado a su animal en una barandilla de la entrada.
El hombre pasó un rato agradable y pudo reponer fuerzas. Pero al salir, descubrió con amargura que su burro había desaparecido.
– ¿Alguien ha visto a mi burro?- gritó desesperado.
Nadie contestó, y volvió a preguntar:
– ¿Alguien ha visto a mi burro? ¡Me lo han robado!
Entonces, un chico muy joven se acercó a él y le dijo:
– ¿Un burro ya viejo, cojo de una pata y ciego del ojo derecho, que llevaba una carga de trigo?
– ¡Sí! ¡Ese es! ¡Devuélvemelo! ¿Dónde lo has escondido?- gritó el hombre muy enfadado, seguro como estaba de tener delante al ladrón.
– No, señor, si no sé dónde está…
– ¿Me tomas el pelo?- gritó aún más enfadado el hombre- ¿Y cómo sabes entonces cómo es? ¡Ahora mismo te llevo ante el alcalde y él sabrá castigarte!
El chico inteligente ante el alcalde
El hombre agarró al joven y lo llevó a la fuerza ante el alcalde de aquel lugar.
– Señor- dijo el dueño del burro- Este joven robó mi burro y no quiere devolverlo.
El alcalde preguntó al chico:
– ¿Es eso cierto?
– ¡No, señor!- respondió el joven- Yo no he robado su burro.
– Entonces, ¿cómo sabe él que mi burro es cojo, tuerto y que llevaba trigo?
El alcalde miró al joven, expectante, esperando una respuesta:
– Verá, señor- dijo entonces el chico inteligente- Me di cuenta de que el burro era cojo porque en el camino las huellas de la pata izquierda se hundían mucho menos en la arena… y también me fijé en que la hierba del lado derecho estaba alta, mientras que la del lado izquierdo estaba mordisqueada. Así que pensé que el animal no podía ver por el lado derecho y por eso solo comía la hierba del lado izquierdo… Y sabía que llevaba una carga de trigo porque en el camino he visto pequeñas espigas que se fueron cayendo de su alforja…
Tanto el alcalde como el dueño del burro, se quedaron con la boca bien abierta. Las reflexiones y deducciones de aquel joven eran asombrosas. El dueño del burro le pidió disculpas, seguro ahora de que iba a cometer una gran injusticia con él. El alcalde, por su parte, le dijo:
– Te auguro un gran futuro, jovencito. Eres muy inteligente. Tal vez algún día puedas llegar a ser alcalde…
El joven se alejó de allí riendo a carcajadas…
Qué temas puedes trabajar con este cuento del chico inteligente
Utiliza este cuento corto iraní, ‘El chico inteligente’, para reflexionar sobre:
- La observación como base de la inteligencia.
- Los prejuicios.
- La justicia.
- El arrepentimiento.
Reflexiones sobre el cuento popular ‘El chico inteligente’
No es más listo el que más sabe sino el que sabe observar y sacar conclusiones de sus observaciones… Vamos, el clásico método del gran Sherlock Holmes, pero en la vida real:
- La inteligencia y la observación: Muchas veces pasamos ‘de puntillas’ por los sitios, sin fijarnos en todo lo que nos rodea. Pues bien, son los detalles lo que nos aportan muchísima y valiosa información. El protagonista de este cuento, ‘El chico inteligente’, nos demuestra la cantidad de cosas que podemos intuir a partir de la observación. Tanto es así, que puede crear ‘malentendidos’, ya que otras personas no entenderán cómo conseguimos saber todo eso…
- Los prejuicios: El propietario del burro se dejó llevar por sus prejuicios y un primer impulso provocado por la ira, le hizo pensar que el chico inteligente le había robado el burro. ¿Cómo podía saber, si no, tantos detalles del animal? Sin embargo, pronto entendió que no hay que dejarse llevar por la primera impresión. Las apariencias engañan, y en el caso de la justicia, siempre hay que esperar a escuchar todas las versiones antes de acusar y sacar una conclusión errónea.
«Los prejuicios nos llevan a menudo a cometer graves errores.»
— (Reflexiones sobre ‘El chico inteligente’)
Una reflexión más sobre ‘El chico inteligente’
- La inteligencia y el poder: En esta historia del chico inteligente también llama la atención el final del relato. Por un lado, el propietario del burro se da cuenta de su grave error, al haber acusado sin pruebas al chico inteligente, y entonces se aleja arrepentido. Sí, surge la vergüenza y el arrepentimiento.
Y por el otro lado, tenemos al alcalde, que acaba de asistir a toda una lección de inteligencia sublime. Su ego hace recomendar a aquel joven que piense en su futuro… como alcalde. El joven inteligente entonces, se ríe. ¿Por qué? Es sin duda una crítica al poder, que no siempre (o casi nunca) está ligado a los más inteligentes…
Otros fantásticos cuentos populares con sus reflexiones
¿Te gustó este cuento del chico inteligente? Te proponemos ahora leer estos otros cuentos populares. Todos ellos incluyen reflexiones finales sobre los mensajes que transmiten:
- El mono y el tiburón: Este es un cuento popular de Colombia que nos habla de prudencia, y de cómo la naturaleza, nuestra forma de ser, siempre termina saliendo a la luz, por mucho que intentemos ocultarlo…
- La princesa y el jazmín: Aquí tienes un precioso cuento popular español, un cuento de hadas sobre una joven sobreprotegida por sus padres… Descubre las consecuencias.
- El valor de la verdad: En este caso te proponemos leer este cuento popular chino, un cuento oriental que nos habla de la importancia de la sinceridad.
Y recuerda que también puedes escuchar muchos cuentos y relatos narrados mediante podcast en el canal de Tucuentofavorito.com:
¿Te ha gustado el contenido?
Puntuación media 5 / 5. Votos: 10
¡Todavía no hay votos! Sé el primero en valorar el contenido.