El águila y el milano. Fábula de Esopo sobre los engaños

No te creas todo lo que te prometan, nos recuerda esta fábula corta de Esopo, ‘El águila y el milano’, que advierte del peligro de creer las extrañas e inverosímiles propuestas de los más astutos y zalameros… Aquí tienes la fábula corta y más adelante, las reflexiones que podemos sacar de esta historia.

TIEMPO DE LECTURA: 2 MINUTOS

La fábula ‘El águila y el milano’, sobre los engaños

El águila y el milano, fábula de Esopo para niños
‘El águila y el milano’, una fábula de Esopo sobre los engaños

Se encontraba un águila muy triste en la rama de un enorme árbol. No quería moverse ni cazar, pues estaba deprimida.

Un día, un milano que pasaba por allí, paró a su lado y viendo lo triste que estaba, preguntó:

– ¿Qué te pasa, águila, por qué estás tan triste?

– Ay, milano… la gran ilusión de mi vida es poder formar una familia, pero no encuentro pareja.

– ¿Cómo es eso? ¡Con lo hermosa que tú eres! ¡Pues elígeme a mí! Yo soy fuerte, tengo unas alas preciosas, ¿las ves? Y unas enormes garras. Y por supuesto, cazaré los mejores manjares para ti si te casas conmigo.

– ¿De veras?- preguntó entonces el águila, a quien le gustaba mucho comer- Y dime, ¿qué serías capaz de cazar por mí?- preguntó.

– Pues… un día llegué a cazar un avestruz– respondió entonces el milano, para gran asombro del águila.

– ¡Pero si es un ave enorme!

El águila, impresionada, le dio el sí quiero al milano y se casaron. Ese mismo día, pidió para cenar un avestruz. Pero después de un largo rato, el milano apareció con un apestoso ratón de campo. El águila, espantado, protestó:

– ¡Me prometiste un avestruz, no ese mísero ratón!

El milano, sin embargo, le dijo con total tranquilidad:

– Ya ves, tuve que mentir para que accedieras a estar conmigo. ¿Cómo iba si no a conseguir casarme con el rey de las aves?

Moraleja: «Desconfía de quien te ofrece cosas increíbles. Los más zalameros suelen ser los más mentirosos».

(‘El águila y el milano’ – Esopo)

Qué temas puedes trabajar con la fábula del águila y el milano

Utiliza esta fábula corta de Esopo, ‘El águila y el milano’, para reflexionar sobre:

  • Las mentiras.
  • El valor de la prudencia.
  • La gula.
  • Lo que pasa cuando nos dejamos llevar por los impulsos.

Reflexiones sobre la fábula del águila y el milano

Las mentiras muchas veces se disfrazan de verdad con tanta afinación y persuasión que es difícil diferenciarlas. Pero ahí debe entrar en funcionamiento el sentido de la prudencia, un sentido que en este caso, en la fábula del águila y el milano, brilló por su ausencia. ¿Sabes por qué?:

  • No te fíes de los regalos ‘desorbitados’: Está claro que un milano, que es un ave más menuda que el águila, no puede cazar un avestruz. Sin embargo, el águila le creyó, a pesar de que esta extraña oferta del milano era bastante sospechosa. Y es que en esta historia del águila y el milano, una emoción, el de la necesidad de creer que algo inverosímil es verdad, movido por la gula y el deseo, cegó por completo el sentido común del águila. Y ya, con la venda en los ojos, se creyó la gran mentira del milano.
  • No dejes que se nuble el sentido de la prudencia: Si el águila hubiera recapacitado un poco más en la oferta del milano, habría sospechado que este ave podía estar mintiendo. La desconfianza en los desconocidos es necesaria, es como un escudo de protección, una luz de alerta que nos previene de estos zalameros y embaucadores que saben como nadie manejar la mentira.

Una reflexión más sobre la fábula del águila y el milano

  • Busca la sinceridad: Dicen que la verdad es fea. No se viste tan hermosa como la mentira. En ‘El águila y el milano’, la propuesta del milano era tan hermosa… que el águila debería haber desconfiado. Si el milano le hubiera propuesto al águila, sin embargo, llevar cada noche de cena una ratón de campo, esa verdad, tan poco atractiva, seguramente no hubiera encandilado al águila, tan ceremoniosa y poderosa. Por eso, el milano supo jugar muy bien sus cartas y usar la mentira a su favor.

«Los zalameros, los embaucadores, saben como nadie manejar la mentira.»

— (Reflexiones sobre ‘El águila y el milano’)

Otras fábulas de Esopo para niños

¿Qué te pareció la fábula del águila y el milano? Prueba a leer también estas otras fábulas de Esopo con sus comentarios finales:

  • La cigarra y la hormiga: Pensemos que el esfuerzo tiene en un futuro su recompensa. Sin embargo, dejarnos llevar por la pereza, puede pasarnos factura…
  • La zorra y las uvas: No hay peor mentira que la que uno se hace a sí mismo, ni mayor frustración…. Te explicamos el significado de esta famosa fábula.
La zorra y las uvas, una fábula de Esopo sobre la soberbia
La zorra y las uvas, una fábula de Esopo para niños
  • El perro y el heno: No hagas a otros lo que no te gustaría que te hicieran a ti. Sobre esto trata precisamente esta fábula corta de Esopo. ¡Te encantará!

Y recuerda que muchas de estas fábulas de Esopo también puedes escucharlas narradas mediante los podcast de Tucuentofavorito.com que encontrarás aquí:

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Publicado por Estefania Esteban

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Soy Estefania Esteban y soy periodista y escritora de literatura infantil.

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